16 de enero de 2010

El Coronel Aureliano Buendía, que le dice a su compañero Gerineldo, tras sobrevivir a un atentado, “morirse es más difícil de lo que algunos piensan”.
Cien años de Soledad


No Aureliano no,
con todo respeto le digo,
morirse es cosa fácil,
y tampoco tiene que ser de a poquito
porque hasta de cantazo se vale,
y hasta se puede morir uno sin extremaunción
ni esperar a nadie
ni aguardar protocolos,
morirse de morirse,
así, sin velorios ni cuentos, sin enfermedades de se consumió poquito a poco,
morirse de morirse, Aureliano, de morirse,
de me pasó ahora y punto.
No, Aureliano, no, que no es difícil,
que se va de apaga y vámonos,
de caite ahora y no esperes más luego,
que basta estar ahí, bajo algún techo
o cruzando un puente,
trabajando bajo una roldana
o visitando alguna iglesia,
basta estar debajo o encima o hasta al lado
de cualquier cosa
y que de repente todo tiemble
porque ya se sabe que la muerte no siempre es silenciosa
y veces hay en que llega anunciándose con panderetas y quebrantos.
No, no es tan difícil nada, Aureliano,
ni hay que hacerlo solo,
se vale hasta todos juntos,
más solidarios que nunca,
más juntos que otras veces,
porque no es difícil, Aureliano,
todo lo contrario,
para los pobres de la tierra es la cosa más fácil del mundo.

Gilberto Hernández Matos
15 de enero de 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario